Aquí estamos!

Soy un soldado de los que a millares surgen a ofrendar su vida y de los que muchos perecen, sobreviven unos cuantos y muchos menos llegan a la fama que pertenece, eso sí, a la acción de conjunto. La sangre que vertamos transformará la patria en un país libre y más cristiano; lo volverá más noble, más sano; lo hará fuerte. El soldado, el Cristero desconocido, volverá con el traje hecho jirones, salpicado por el barro del camino y la sangre del combate. Acosados por el enemigo, siempre en peligro, no puedo saber en manos de quién puedan caer estas memorias. Los hechos son reales, los nombres de personas y lugares tendré que ocultarlos. Días vendrán en que pueda cantarse, por hombres capaces, la epopeya con los nombres de sus héroes. Para entonces las cadenas están rotas y  México sabrá agradecerlo. Luis Rivero del Val, “Entre las patas de los Caballos”

Efren Quezada, Rivero del Val y José Gutiérrez entre otros
Efren Quezada, Rivero del Val y José Gutiérrez entre otros

Seguro no somos los mas capaces, ni los mejores, solo somos un grupo de personas agradecidas con nuestros antepasados, por el heroico sacrificio que hicieron para darnos libertad. Dios bendiga a nuestros Cristeros por todo lo que tuvieron que padecer por nosotros. nos queda luchar porque su memoria no desaparezca, nos queda librar los combates modernos en memoria suya.

¡¡Viva Cristo Rey!!